Para evitar que el agua de lluvia se deslice a lo largo del cable al aire libre de la antena y entre en la casa, asegúrese de que la porción al aire libre del cable cuelga por debajo del punto de entrada.
Si el agua de lluvia entra en el aparato, puede provocar una descarga eléctrica o un incendio.
Si está usando una antena al aire libre, asegúrese de dejar la suficiente distancia entre la antena y el cableado cercano, con el fin de evitar el contacto en caso de que la antena se desplace repentinamente por una ráfaga de viento.
Si una antena cae de manera descontrolada, puede causar lesiones o una descarga eléctrica.